¿Sabes lo que cobran tus compañeros? ¿Tus jefes? ¿Te resultaría incomodo contar y hacer público cuanto cobras?
En un llamativo articulo, el CEO Buffer (la aplicación para redes sociales) explica como en su empresa decidieron que los salarios de todos, incluido él mismo, que concretamente gana 151.800 dólares, fuesen públicos.
Aparentemente, no solo está el caso de Buffer, también está el caso de SumAll, Whole Foods, etc., no sé si esto es una moda pasajera o una tendencia, o una manera de llamar la atención y hacerse publicidad o algo realmente meditado y efectivo, yo personalmente no conozco de primera mano ningún caso de empresa que haya tomado esta postura.
Pero más allá de los motivos, lo que más me ha hecho pensar, y llegar convertir este tema en post, es que en la mayoría de los casos se argumenta que aquello de hacer públicos los salarios fue por reforzar sus valores, por coherencia con ellos, por el valor de la transparencia, valor llevado a la práctica.
Detrás de una medida así había un conjunto de valores empresariales y llegar a publicar los salarios era una medida que no dejaba duda de que en la empresa los valores no eran papel, o una lista de cosas bonitas en la web, aquí los valores van en serio.
Comentaba en CEO de Buffer, Joel Gascoigne, que “la primera vez que establecimos los valores que queríamos tener en la cultura de nuestra empresa, sabíamos que sería un reto increíble. Especialmente desde que hemos visto que los valores pueden fácilmente terminar siendo poco más que un conjunto de palabras escritas en un trozo de papel” (¿te suena?). “En nuestra cultura, el segundo valor en nuestra lista es «Transparencia.» Con este punto en particular, empezamos a pensar en todo lo que hacemos dentro de la empresa y cómo podríamos cambiar a algo más transparente”.
Y lo de la transparencia no solo lo llevan al tema salarial, los correos electrónicos son en abierto (según dicen, siempre que se envían un correo se copia a una lista con más gente)
Más allá de que dejar en abierto los salarios pueda argumentarse desde el punto que genera confianza y de que la confianza es la base de un gran equipo, que la transparencia rompe barreras, y de que los salarios en abierto previenen del mal, a mi esto me ha hecho recordar hasta que punto cuando definimos valores empresariales realmente nos los creemos y tomamos en serio, hasta el final, hasta la última consecuencia.
Cuántos de nosotros hemos estado en empresas con bonitos valores, cuántos hasta hemos participado en su definición… y ¿cuántos hemos estado en empresas que, además de poner dichos valores en un ppt, en una web, los han llevado hasta las últimas consecuencias?
No hace muchos meses que sacamos el tema de los valores en la profesión a nivel de personas, la ética y los valores en la profesión informática, tecnología y desarrollo software, y hablamos de que seguramente habrá centenares de cosas, subjetivas la mayoría, que hagan que, en el ámbito profesional, después de años, alguien siga siendo amigo frente a que te produzca escalofríos verle a él o escuchar el nombre de la empresa de la que viene, la diferencia entre un grupo y otro es que los del primero, los amigos, nunca se saltaron la ética y los valores de la profesión. Y hoy me gustaría extrapolar esto a las organizaciones y equipos.
Si están escritos por algún lado, podrás compartir o no los valores de una organización, te gustarán o no, eres libre de unirte a una organización compartiendo esos valores, pero tener una organización con valores escritos y no llevarlos hasta el final, demostrar con hechos, hasta la última consecuencia que esos valores son de verdad… no deja de ser una expresión más de hipocresía empresarial, un engaño a los que en algún momento se los creyeron y una manera más de clasificar organizaciones en las que merece la pena dejarte la vida de las que son sólo empresas de paso y mal recuerdo.
postdoctorado en la Universidad Carnegie Mellon,
EE.UU. Es pionero en management, planificación,
estimación, product management, Agilidad y en la
aplicación de la inteligencia artificial generativa a la
gestión de la creación de productos y servicios
tecnológicos. Fue el único español en la primera
conferencia Ágil de la historia.
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Sobre el tema de la publicación de los salarios, al menos en España es complicado. Para empezar ya hemos hablado muchas veces que la informática en españa está concebida como un servicio, con unos márgenes muy estrechos y fuértemente condicionados por los costes (sueldos). Por tanto las opciones de éxito de una empresa dependen fundamentalmente de su habilidad para manejar sus costes.
Publicar los salarios de la plantilla de una empresa equivale a poner al descubierto la estructura de costes de la empresa, y por tanto, poner en manos de tu competencia casi toda la información acerca de cómo consigues ser competitivo, resumiendo, estás vendido.
Creo que la publicación de todas las retribuciones, no salarios estaría bien si fuera internamente y donde todos pudieran al menos intuir que trabajo realiza cada persona por dichas retribuciones. Ejemplo, ¿es transparencia decir el sueldo exacto de un ministro y no decir que dentro de tres años será millonario con un super empleo en una empresa privada amiga?
es necesario tener todos los datos de la ecuación y que el que la lea sea capaz de entenderla más o menos