Las organizaciones del NO por defecto, síntomas y efectos secundarios

El NO por defecto, yo también lo llamo el coeficiente de rozamiento al cambio de las organizaciones. Es fácil apreciar síntomas del NO por defecto, fácilmente, suele continuar, en apenas milisegundos, en apenas tiempo para pensar, a frases que proponen sugerencias, cambios, nuevas ideas, nuevas tecnologías…
-Oye, y si hacemos…
-NO, porque…
Después del porque los añadidos son múltiples, destacando algunos como “porque siempre lo hemos hecho así y si estamos aquí aún será por algo”, “eso no va a funcionar” o el popular y explicativo “no lo veo”.
En un mundo como el de hoy, en el que la tecnología y los procesos evolucionan casi cada día, si ya no era poco complicado estar constantemente reciclándose y aprendiendo, el síndrome del “NO por defecto”, además, añade dos problemas más.
Primero, desgaste, antes de probar nada nuevo toca convencer (siempre que sea posible, porque hay coeficientes de rozamiento al cambio que literalmente detienen en el tiempo a muchas organizaciones). Segundo, miedo, porque los afectados del síndrome del “NO por defecto” suelen  serlo también del “te lo dije, no funcionaría”, lo que acaba contagiando a los innovadores, que acaban teniendo miedo de proponer nada nuevo (y ya sabes, el miedo, un peligro mayor que cualquier mala práctica de gestión software).
Yo me encuentro mucho con el “NO por defecto”, en “Y si probemos un ciclo de vida iterativo en vez de un cascada”, “Y si metemos un PMD para ver la calidad”, “Y pasamos a producción con más frecuencia”, “y si escribimos un libro contándolo”, “y si….”
No sé tú que piensas, pero yo me preocuparía de ello, sí, del NO por defecto. Bien porque estés afectado de dicho síndrome, (yo para evitarlo yo me auto medico periódicamente con sal de la zona de confort). Bien porque no estés afectado… pero estés rodeado de afectados, normalmente se acaba pegando.
Lo más curioso es que mientras yo dedico estos minutos a escribir este post, tu a leerlo, mientras se pasan días intentando convencer del “SI se puede” o de “y qué pasa si lo intentamos”, hay ya demasiadas organizaciones que trabajan con el SI por defecto, y que van sacándonos kilómetros de delantera por minuto.
¿Probamos el SI por defecto?

Javier Garzás

0 comentarios en “Las organizaciones del NO por defecto, síntomas y efectos secundarios”

  1. Y que hay de la mala practica de decir «Si por defecto»
    ?… XD
    Es una practica que lo experimente en un par de empresas en donde el área de TI aceptaba todos los pedidos de las demas areas con un alegre «SI por defecto» causando un verdadero caos, luego no se cumplian ninguna de las metas, ni de calidad, ni de fechas, nada…

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